José Antonio Martín Pereda, académico de la RAI, destacó que Telefónica, desde su fundación en 1924, forma parte de la memoria colectiva de la sociedad española y, más que ser el nombre de una compañía, es el nombre que la mayor parte de los habitantes de nuestro país asocian a un servicio telefónico genérico. Incluso para muchos, su recuerdo forma parte de su memoria sentimental unida a momentos determinados de sus vidas.

A lo largo de los años, los nuevos avances técnicos se iban introduciendo de manera gradual y se tomaban por la sociedad como parte de su nueva forma de vida. Una vida muy larga que ha sido, de hecho, la misma vida que han tenido las telecomunicaciones a lo largo de los siglos XX y XXI. La historia de Telefónica es la historia de los sistemas de comunicación que han ido surgiendo y cómo se han ido incorporando a la sociedad.

Toda esta evolución ha determinado que la Real Academia de Ingeniería la concediera el Premio Academiae Dilecta, como reconocimiento a los casi 99 años de vida que ha vivido con nosotros, con la sociedad española y que en unos meses se verán culminados en su centenario.

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Asociación Española de Ingenieros de Telecomunicación